Qué bonita es la noche,
¿No?
Noche; del latín, Nox, noctis. Periodo en el que una parte de la
tierra, por mediación de la rotación, deja de tener y recibir la luz solar y
por ende, se queda a oscuras. Momento en el que comienzan otros tipos de
amaneceres. Y no me he vuelto loca, a la noche hay unos amaneceres preciosos.
¿Nunca habéis estado en un lugar desde el que poder ver toda una ciudad que
comienza a encender sus luces? Es una pasada. Os lo recomiendo. Es otra manera
de amanecer.
La noche. Qué bonito es todo de noche y qué intensa y breve
parece. La noche es como un jeroglífico, un enigma que se despliega en espacio
y tiempo. Preguntarse sobre la noche; nuestra querida noche, es indagar en los
múltiples sistemas significativos y expresivos; el significado de la misma, de
la articulación de las calles, arquitectura, barrios, acciones, movimientos,
actitudes, el despliegue temporal y el despendole atemporal. Implica apreciar
la multitud y diversidad de noches existentes. Noches de calma, de guerra, de
pasotismo, de desenfreno, de película, de sexo...
Y qué bonita la vida nocturna. El lado oscuro de la noche. A todos
nos gusta el momento de la noche cerrada y unos buenos temas que escuchar con
los colegas o esa noche de idilio... éso que haces de día, pero que sabe a
noche y para qué engañarnos; sabe distinto.
¿Y por qué la nocturnidad? ¿Por qué la oscuridad?
Y por qué será que en las películas siempre el asesinato es
nocturno, por qué será que el beso es más intenso por la noche. Y no nos
olvidemos de la lluvia. Noche y lluvia, escena asegurada.
Por la noche todo es más intenso y aún no le encuentro el por qué.
Las fiestas, las risas, las caricias, los sustos, las sorpresas, las tristezas.
Todo magnificado de noche. Y siempre la buscamos. Es ésa acción demente de
saber que no pero si, que a esa hora todo será mejor. Ideas escindidas con algo
en común. La oscuridad. Y qué jodido bonito es todo con el foco lunar. ¡Me dirás
que no! Que la ciudad no es la misma de día que de noche, que la piel de
gallina no se siente igual a la mañana que al atardecer. Que tus gritos
entrecortados, no son los mismos al despertar que en la madrugada. Que no.
Me gustaría encontrar la receta de la noche. Ésa que te hace más
salvaje y más loco. Ésa que hace que una mirada pueda ser letal y un adiós, una
causa de muerte. Ésa que hace que la aparición en escena de ET, fuese tan
impactante.
Si te soy sincera, yo soy ave nocturna. Me gusta ver con menos
luz. Disfrutar de lugares que gracias a mi falta de orientación, no reconoceré
al volver a ellos de día. A tu cama por ejemplo. Que no sabré si dormí en el
lado izquierdo o en el derecho. Que me conformo con saber que amanezco en mi
casa y tu camisa con olor a Gin tonic y las medias rotas. Que me da igual todo
pero la noche es perfecta.
Buenas noches.
Att: La chica que duerme en el lado derecho de la cama.
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